lunes, 16 de mayo de 2016

Solo para Cristianos

No importa si el domingo, en una reunión multitudinaria te fuiste de espaldas en el momento de la "ministración"; interesa más como enfrentas la vida cuando nadie te ve.

No importa qué tan alto puedes saltar mientras celebras durante una canción de "alabanza" el domingo en la mañana; es como caminas el lunes con los pies sobre la tierra lo que cuenta.

No importa lo fuerte de tus "gritos de júbilo" mientras estás en la reunión; espero que tu familia y empleados no tengan que escuchar gritos tan Fuertes cuando no están de acuerdo contigo.

No importa cuánto "hables en lenguas" durante un tiempo de éxtasis; ojalá y con la misma intensidad refrenes tu lengua cuando se trate de chismear.

No interesa que hagas "pactos con Dios" sin sentido o "siembres" ofrendas; lo realmente importante es que seas igual de generoso con alguien que sabes que nunca será capaz de retribuir tu gesto.

No importa que creas en apóstoles y profetas modernos; lo que sí es preocupante es que consideres sus palabras con más importancia que las del libro que tú llamas tú "regla de fe y conducta"

Y es que al final mi amigo, ser cristiano y seguir a
Jesús es mucho más que todo eso.
Y es que ver nuestra "santidad" con los ojos del nazareno, es darse cuenta que la de nosotros parece de papel. Él toca a los que nadie quiere tocar y al hacerlo cambia vidas, les sana el alma aún antes de sanarles el cuerpo.
No huye de las "malas influencias" ni de los "lugares pecaminosos", se queda e ilumina, se queda y sala la tierra, se queda, toca y libera... Se queda y destila amor por los que nadie quiere amar, se acuerda de los olvidados y defiende a los vulnerables, se queda porque ama.

Aislarnos nunca ha solucionado nada, nuestras "normas de pureza" han dejado al mundo a oscuras...
¡Quédate y brilla!